¡Maldito conductorcito de las narices!

Hi!
Quizás me pasé un poco con el título, pero es que me ha sacado de quicio... mejor lo explico todo desde el principio jaja

Bueno, esta mañana empezamos el instituto a la hora normal... pero había que estar en la parada del autobús a las ocho menos cuarto, que era cuando tenía que llegar. Mi madre me llevó a menos veinte, y me quedé así, esperando.

Llegó un autobús.
Nos íbamos a subir.
Era el 3.

Esperamos, llega más gente.

Otro autobús. Subiendo, tan campantes...
Era el 12.

Me pongo a charlar con los que conocía.

Llega otro.
El 13.

Se va mi madre.

Otro más.
El dos.

Nos ponemos a quejarnos a gritos [quizás seamos algo... dramáticos, pero es que vimos amanecer y todo].

Llega el quinto.
¡¡ES EL DIEZ!!!!

Nos subimos en tromba, y empieza a contarnos una excusa estúpida.


POR LA TARDE...

Vamos al aparcamiento, y nos ponemos a buscar el autobús. 1, 2, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 11, 12, 13.
- ¿Y el diez?
- Llegará luego.

Se va el 4.
Se va el 1.
Se va el 7.
Se va el 12.
Se va el 13.
Se va el 5.
Se va el 2.
Se va el 6.

- ¡¡¿¿PERO CUÁNDO LLEGA EL MALDITO AUTOBÚS??!!

Esperamos.
Esperamos.
Esperamos.
Llamamos a nuestros padres.
No pueden venir a recogernos.

- ¿Nos vamos andando?
- ¡Pero si estamos en medio de la nada!

Aparece el coche de la madre de Tea...

nos dice que nos lleva a casa.
Subimos.

¡¡Ya no somos naúfragos!! WEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!!!!

XDDD

Y ésto, contado de otra forma, sería lo que nos pasó... XDDDD